No hay calma escondida
en el silencio de la noche,
en los desiertos de caricias,
en las calles sin nombre.
No hay calma
tras el vendabal sangriento
tras los abismos que separan
¿cuándo se derrumbaron los puentes...
...que me conducían al cielo?
No hay calma en la luna
ni las esferas celestes
estalló en un grito feroz...
Feroz e inerte.
No hay calma tras la calma
ni tras las ventanas cerradas
el mundo sigue girando
ajeno a lo que en su vientre pasa.
en el silencio de la noche,
en los desiertos de caricias,
en las calles sin nombre.
No hay calma
tras el vendabal sangriento
tras los abismos que separan
¿cuándo se derrumbaron los puentes...
...que me conducían al cielo?
No hay calma en la luna
ni las esferas celestes
estalló en un grito feroz...
Feroz e inerte.
No hay calma tras la calma
ni tras las ventanas cerradas
el mundo sigue girando
ajeno a lo que en su vientre pasa.
1 comentario:
Me parece un poema fascinante. He leído también tu articulo de Barbi Xeplion. Te felicito!
Me encanta como piensas, como escribes.
Mucho ánimo ,suerte y ante todo SALUD
MJ
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