ELLA, el trailer:
Almudena Calvo: "Perseguir un sueño te ayuda a sobrevivir" Locutora y actriz debutante. Ha hecho subir su Trastorno Límite de la Personalidad al escenario.
La lucha contra el trastorno mental deja cicatrices que no desaparecen con los fármacos, pero que se alivian cuando puedes dedicarte a lo que te apasiona. Este es el argumento de Ella, un proyecto de teatro social de Pallapupas en el que Almudena y otras personas diagnosticadas vuelcan su experiencia personal como catarsis.
Más teatros y menos psiquiátricos. ¿Estaría de acuerdo con el lema?
-Sí, porque es muy importante tener un espacio donde puedas ser tú misma y hacer algo que te llene. Perseguir un sueño te ayuda a sobrevivir y haría falta menos terapia.
-¿Cuántos años hace que está en tratamiento?
-Desde los siete años, y tengo 31. El ambiente de mi casa no era el más propicio para crecer, no me relacionaba bien con mi entorno, con los niños de mi edad. A los siete años ya me estaban dando antidepresivos.
-¿Pastillas? ¡Si solo era una niña!
-Me medicaban para la depresión infantil. En la adolescencia cambié de psicoterapeuta, que me diagnosticó un trastorno maniacodepresivo, lo que ahora se llama bipolar, y me recetó antidepresivos más otras pastillas. A los 21 años tuve un brote psicótico y me diagnosticaron Trastorno Límite de la Personalidad, que es el diagnóstico con el que me siento más identificada.
-¿Qué síntomas tiene?
-Vacío, ataques de ansiedad, pocas ganas de hacer cosas...
-¿Puede describir ese vacío?
Almudena Calvo. Fotografía: JOAN PUIG
-Es como un dolor en la boca del estómago, una soledad muy fuerte. Nada te llena. Aunque hagas mil cosas que te gustan o estés rodeada de la gente que más quieres, te sientes vacía.
-¿Nada te llena? ¿Seguro?
-Tengo dos programas de radio, en Radio Nikosia [una emisora formada por personas con algún problema de salud mental] y en Radio Rubí, donde presento el programa El fil de la troca con Raúl, mi compañero. Tanto la radio como el teatro son ilusiones que me animan a salir de casa y así el vacío duele menos.
-¿Lo de la radio es vocacional?
-Totalmente. Cuando era pequeña mis padres discutían mucho y yo me encerraba en mi habitación y me tiraba hasta las tantas de la mañana escuchando programas de confesiones como Hablar por hablar. Yo deseaba estar al otro lado.
-Y lo consiguió.
-Entré en Onda Cero y acabé llevando la producción de tres programas. Estaba desde las cinco de la mañana hasta las ocho de la tarde allí metida. Al no tener la familia compensada, mi familia era la radio. Hasta que echaron a 50 personas y yo estaba entre ellas. Tenía 21 años y enfermé.
-¿Qué ocurrió?
-Tuve un bajón muy grande, un brote psicótico. Se me desmontó mi mundo. Los problemas me afectan de forma diferente. Lo que a una persona le afecta a nivel cuatro, yo lo siento a nivel ocho.
-¿Cuándo tienes un brote pierdes mucha gente por el camino?
-Estás muy alterada y lo más común es que la gente se aleje, porque ya no te conoce y hay mucho desconocimiento sobre lo mental. También hay gente que se molesta en estar a tu lado y conocerte en ese momento. Hay que ser muy voluntarioso.
-Es amor a prueba de bomba.
-Yo me siento afortunada porque he tenido esa amiga que ha estado siempre ahí. Incluso cuando he salido corriendo pensando en el suicidio, ella corría detrás de mí, llorando sin saber qué hacer.
-¿Qué se puede hacer?
-El mero hecho de saber que aquella persona está ahí y que te acepta como eres te da calma. Aceptar a una persona como es, con sus defectos y sus virtudes, es una cosa que deberíamos hacer todos, diagnosticados y no diagnosticados. Lo que más ayuda es que te sigan tratando igual que antes del brote para que tú puedas sentir que eres la misma de antes, eso ayuda a volver a la naturalidad.
-¿Naturalidad?
-No nos gusta mucho usar la palabra normalidad.
-¿Por qué no?
-¿Quién dice lo que es normal o quién es normal? El uso de las palabras es importante. Yo, por ejemplo, me considero una loca con todas las letras de la palabra.
-La corrección política a hacer puñetas.
-En Radio Nikosia desmitificamos lo que conlleva la palabra. Sabemos cuándo nos llaman locos con ganas de hacer daño y cuándo no.
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Información publicada en la página 80 de la sección de Contraportada de la edición impresa del día 09 de julio de 2011 VER ARCHIVO (.PDF)
4 comentarios:
Mi más sincera enhorabuena,
Un abrazo,
Amaia.
Felicidades¡¡.
Abrazos.
Jesús Castro
Felicidades por la propuesta y mucho ánimo.
Un abrazo fuerte para Almudena, esperamos que todo vaya a mejor.
César M.
Gracias por la parte que me toca. Amaia que alegría verte por aquí, ya pensaba que nos habíais olvidado ;) Espero que estéis rebien.
Un abrazo para vosotros lleno de orgullo por el talento de mi niña!!!
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